Un virus para la corona
“Emancípense de la esclavitud mental
porque nadie si no ustedes mismos pueden liberar sus mentes.
No tengan miedo de la energía atómica,
ya que ningune de elles puede detener el tiempo”
Roberto Marley, Canción de Redención
“No podemos continuar fingiendo día tras día que alguien en algún lugar pronto hará un cambio. Somos una parte de la gran familia de Dios. Y la verdad, ya sabes: el amor es todo lo que necesitamos”.
Miguelito Jackson, Nosotres somos el mundo
“Apágalo, enciéndelo
no puedo seguir asi”
Gustavo Cerati, Sobredosis de TV
Desde hace semanas cargo con una tos seca producto de mi intención de dejar de fumar tabaco. Toy contento manteniendo una dieta de dos o tres puchos por día. Los últimos días, en los tiempos de descanso del techado de mi rancho en eterna construcción. El miércoles terminamos re cansados y le digo al Jipi que tenía una fiaca bárbara de ir a buscar la moto al mecánico del pueblo. “Anda a buscarla mañana. Total nosotros nos quedamos trabajando y de paso me buscas los pibes en la escuela”. Arranco caminando por el monte en un casi mediodía sudoroso. Llego quince minutos antes y me retiro media cuadrita pa tomarme un rapé de los kallawayas, uno que te hace llorar y estornudar como loco. De pronto empiezo a ver gente que pasa por detrás de los autos estacionados en la callecita de la escuela y me mira con cara de algo parecido al asco o al miedo. Pienso que quizá es por mi ropa de trabajo-monte y mi sudor evidente. Ahí caigo en cuenta que está pasando esto del coronavirus y les vecines ya deben llevar más de cinco días de información constante y continua, y a falta de otros candidates (lejos de les chines, les italianes y les chetes que viajan a esos países) vendría a ser algo así como el primer infectado de coronavirus en el valle. Ya me los imagino en el almuerzo comentando que evidentemente hay que cerrar la escuela (o matar a les jipis). Encima estornudo como Rodríguez Larreta, poniéndome la mano en la boca. Y a veces ni siquiera.
A la vuelta comento el episodio. Como terminar el techo implica asado y festejo, ahí están, además del Jipi y el Kamacho, que me están ayudando en la obra, Vicente, el productor de medicina natural, el campesino metarlero, el chico P y la Señorita Mayonesa. Al rato caen la chica punkieanarquista y el trosko Carozo. Traen un licor de piquillin y un intento de fernet, una soda, una damajuana de vino, un matambre de cerdo y una docena de chorizos. Mucho pan.
-Parece que mata a los viejos- comenta el Kamacho- No se si será por lo que dijo la doña del FMI, eso que en Europa o matan a un par de viejos o se acaban las jubilaciones de privilegio.
-Porque en Europa son todas jubilaciones de privilegio, ¿o que?- aclara mientras prende una hojarasca verde en una pipa de zanahoria.
-Ma que cuarentena ni cuarentena, yo tengo varios kilos de arroz, cinco gallinas y un chumbo que me lo llevo acá en frente y me cazo un par de vacas. Total esos caretas tienen 600. Una no se dan cuenta. Ya que no quieren pagar retenciones que pongan una vaca- dice el Jipi con cara de guri a punto de mandar cagada.
-En una de esas hasta le saqueo el supermercado a mi primo y me traigo un par de cañas y damajuanas de vino. Si algo tengo seguro es que el apocalipsis hay que disfrutarlo- aclara.
-Es todo plan de los illuminati, o los reptilianos, o los respiratorianos, alguno de esos -comenta la chica punkieanarco.
-Los veganos deben andar defendiendo la imagen de los pobres murciélagos de campo- agrega.
-Es cierto que miles se mueren de hambre, agrotóxicos, una gripe común o el tiro de algún cana. Pero el caso es que esto se expande rápido y el gobierno tiene que reaccionar- reflexiona, contemporizadora como siempre, la señorita Mayonesa.
-Además hay cosas buenas: como que ya nadie le da bola al paro del campo, el FMI, o el no paro de los maestros. Y de paso, salvo papel higénico y alcohol en gel, se dejan de consumir un poco. Pensá que no pueden irse al shoping ni a ver la película o la banda de moda. Eso compensa la falta de ingresos. Genera reflexiones. Porque evidentemente es un fracaso de la ciencia positivista y muches que se creían salvados de la muerte ahora empiezan a hacerse preguntas. Incluso a valorar la salud pública o la aerolínea de bandera que los rescata de Madrid o Miami. Vuelven los dolares. Hasta quien te dice baja la inflación- agrega.
-¿Y viste la que hicieron los chinos?- se ríe tabaco armado en mano el trosko Carozo – Dejaron devaluar el yen y caer la bolsa y cuando las acciones de la empresas chinas adquiridas por capitales extranjeros cayeron, se las compró el Estado por chaucha y palitos. Después llamaron a los cubanos y pidieron la vacuna y desarmaron los hospitales que había construido o los convirtieron en boliches bailables. Total son como los bolivianos o los chilenos. Si acá una docena de muertos no son nada, imaginate allá. Mil son un error estadístico. Después le echaron la culpa a Estados Unidos.
-Lo que si es indignante que los putos medios de comunicación no se dignen informar que los cubanos tienen la cura y además tomaron medidas públicas más eficientes que en Italia o Trumpilandia- se indigna para no perder la costumbre.
-Y ni te digo como le pegaron al Tío Alberto y el gordo Gines. Con esto del coronavirus, por ejemplo, ya me di cuenta que a ese Novaresio evidentemente le paga la CIA. Igual que al resto de animales sueltos. Yo si alguna vez cometo un pecado capitalista por dinero me gustaría ser guionista de ese programa. Es impecable. Como los Simpson pero al revés. Genios del mal- comenta el chico P.
-Lo que me indigna que ya abrís los diarios, el wup, fasebok, lo que sea, y solo hablan de eso. Hay más memes que muertos en el mundo – agrega.
-Tampoco cuentan que en Italia hay expresiones culturales de resistencia capitalista y huelgas. Porque viste que estos turros cierran las escuelas, las ferias, los espectáculos y manifestaciones, pero no las fábricas. Ni papel y alcohol en gel les dan a les compañeres. Total lo ponen en le planilla de excel. Un muerto veinte lucas. Buscar reposición- se ríe el trosko que ya prendió otro pucho.
-Parece que los gringos le metieron el bicho a Italia porque estaba haciendo negocios con los chinos. Y a Europa en general por el tema del gas de los rusos. Es como una guerra fría entre tres. Porque a Brasil los gringos lo borraron del tablero. India no se en que anda. La guerra ahora es de baja intensidad, a través de la finanzas, la informática y la bacterología. ¿Viste que hasta dicen que la cuestión esta también es pa que los cuerpos humanos puedan aceptar el 5G?- agrega.
-También dicen que es para bajar la frecuencia vibratoria de les humanes pa que no se acoplen al ritmo de la tierra. Evidentemente estamos yendo en contra de la naturaleza. Si no nos mata un terremoto o un tsunami nos mata un virus- aporta la señorita Mayonesa.
-O la policía- agrega la chica punkieanarco.
-Tiene razón el Jipi. Hay que pasarla piola- advierte el campesino metalero mientra relojea a Kamacho que está pinchando los choris.
-Ya están- anuncia Kamacho -¿Se lavaron todes las manitos con alcohol?
-Hablando de alcohol hay que destapar la damajuana- agrega.
Ilustración: Nico Mezca
Aclaración o Advertencia: Por si no se dieron cuenta pero estas charlas, relatos, columnas, son ficción. Ciencia Ficción Jipi. Cualquier parecido con la realidad no es coincidencia.