Su Magnificiencia Lutembi
El tirano se siente seguro y se descubre la máscara. No recuerda las veces que esa actitud marcó su derrota temporal. Siempre, en algún lugar, hay una aldea de galos con una pócima mágica.
“La muerte de la empatía humana es uno de los primeros y más reveladores signos
de una cultura a punto de caer en la barbarie”
Hannah Arendt
“La única manera de lidiar con este mundo sin libertad,
es volverte tan absurdamente libre
que tu mera existencia sea un acto de rebelión”
Albert Camus
“El poder necesita tristeza porque puede dominarla.
La alegría, por lo tanto, es resistencia, porque no se rinde.
La alegría como potencia de vida nos lleva a lugares donde la tristeza nunca nos llevaría”
Gilles Deleuxe
“Lo único que necesitamos es una cerveza que no engorde.
Pero no.
Los científicos quieren saber si hay vida en marte”
Jack Black
Por Tomás Astelarra Ilustraciones: @fuskavisual
Es evidente que la guita cada vez sirve para menos. Así que decidimos gastarnos la poca que nos queda e irnos de camping a un río donde dicen que la sirena Tana Panaholma fortalece los vínculos de alegre rebeldía con músicas, elixires, historias, bailes, manjares, abrazos, algún beso apasionado, pero sobre todo, un espíritu comunitario y diverso que no busca excusas para encontrarse.
El master Astor Ala cae con una caja de vinos orgánicos artesanales que una vez trocó por un trabajo de carpintería en la casa de Pepe Glam. Fue como hace dos años. Pero nunca las fue a buscar porque la casa del Pepe Glam quedá medio fuera de sus circuitos naturales de circulación orgánica. Pero es que da la casualidad de que Javi MC vive cerca de la casa de Pepe Glam y ante la fabulosa noticia, decide traerlos.
Claro. En realidad fue Javi MC el que trajo la caja de vinos orgánicos artesanales.
Las magias de la sirena Tana Panaholma han comenzado a surtir efecto y ya no estamos distinguiendo quien hizo qué o por qué. De donde vienen y hacia donde van las acciones y los vínculos. El entorno de reciprocidad, apoyo mutuo y buen vivir (además de algunas sustancias milagrosas) de a poco va limando informaciones como el efecto lento en la descomposición de imagen de ese televisor que nuestros abuelos decidían apagar para dejar de ver noticias e irse a dormir. No sin antes besar a la abuela que lavaba los platos escuchando algún bolero en esa radio que emitía un susurro lento y cargado de interferencias (salvo cuando hablaba Evita).
Suipacha rescata del fondo del taller unos bidones de aloja de Piquillín del verano pasado. La Pana Karibe decide honrar a su abuelo y destapar la botella de ron cubano que guarda hace diez años. Hay también productores de cerveza artesanal, pan casero, galletitas, escabeches, encurtidos y dulces, pollos, conejos, cosmética y medicina natural, y una banda descontrolada de niñes que producen las mejoras risas y situaciones del fin de semana.
Hay un río con una ollita divina frente a unas rocas coloradas con forma de totem, un bosquecito de arbolitos para colgar la hamaca siestera, el Phi da clases de yoga, el Parce reparte rapé, la señorita Mayonesa está aprendiendo a hacer masajes tailandeses y el Tío Vicente trajo libritos para leerle a les pibes (cuando no inventa la historia de algún prócer por el que los que les niñes preguntan).
En algún momento decide contar la historia de su Magnificiencia Lutembi, un pequeño cocodrilo de Djibouti al que algún patafísico loco le enseñó a escribir poesía, y así, sin querer, terminó siendo el Vice Regente (es decir la máxima autoridad) del Colegio de Patafísica, gestión durante la cual, decretó el ocultamiento de la máxima ciencia.
-Recuerdo una vez que a un sobrino mío lo contrataron para algún cargo medio en una multinacional- comienzo el cuento el Chicho Serna, metido en el agua con un tremendo bareto y un gorro de ala ancha- No tenía un mango y se estaba comiendo los ahorros de su último despido. Así que decidió aceptar. No sin antes pedirme disculpas conociendo mi ideas y acciones políticas. Le dije que no se preocupara. Como al mes fuimos a pescar y me confesó que estaba muy contento con la experiencia. “Vos siempre me dijiste que estas empresas multinacionales eran unas garcas bárbaras. Pero para mi era una teoría. Ahora pude comprobarlo en la práctica. Apenas pueda me consigo un trabajo honesto y no vuelvo nunca más”, me dijo igual de alegre que consternado.
-Quizá su magnificiencia Mileimbi con su inocencia de cocodrilo poeta viene a desnudar en la práctica al emperador a través del ocultamiento del Estado en manos de un Mercado manipulador y codicioso-le explica Vicente e les pibes, que lejos de ignorar la realidad geopolítica argentina ya comentan al respecto.
-Total-dice el Gitano después de una larga calada del bareto- Nosotras sabemos vivir de nuestro entorno en armonía, tenemos nuestras cooperativas o proyectos, podemos autoabastecernos, organizarnos, sacarle alguna monedita a los pocos privilegiados de este sistema, y seguir pasándola bien sin todos esos consumos superfluos que adquirimos por comodidad gracias a algunas migajas que nos empezó a tirar el Estado. El quilombo lo van a tener los boludos que creyeron que este tipo venía a darle el dinero y el consumo de Elon Musk.
-Quieren libertad. Le vamos a dar libertad-dice y pega otra calada del bareto pa pasarlo.
-Y en este valle hay que hacer como dijo Barrionuevo – arranca la Bruja Suarez, que por casualidad, como si fuera un bastón de la palabra, es la que recibió el bareto – Dejemos de hablar de comunidad y colectivo por dos años y dediquémonos a ponerla en práctica.
-Se levanta el velo de la ilusión y vamos a darnos cuenta que no somos sudakas europeos sino sudakas naturales, con apenas lo necesario pa vivir, con la represión en las calles y los territorios de saqueo, con revueltas populares que tumban gobiernos después de ese saqueo, con presidentes populares que llegan a un Estado desbastado y los vuelven locos, con sectores campesinos que viven al margen de todo eso a través de la autorganización (que incluye la autodefensa)- aterriza geopolíticamente la Señorita Mayonesa (que no fuma marihuana).
-Y si. Quizás algunas gentes se den cuenta que las famosas organizaciones populares no terminaron siendo intermediarias por deseo sino por capacidad. Que la economía popular no solo vive de planes sino de su propio trabajo. Y que va a ser las que te den cuidado y alimento barato cuando todo termine de pudrirse. Por eso pueden darse el gusto de no salir a la calle como los chamuyeros de la izquierda tradicional. Porque ya en este momento están tejiendo estrategias de supervivencia comunitaria con la base de un desarrollo que venimos tejiendo hace muchos años. Y que puede recibir ayuda del Estado, pero no depende de él. Ya van a venir a llamar a las funcionarias que si funcionan-opina el Chico P, que acaba de llegar y ya metió las patitas en el agua para tomar el bareto que le pasa Pipi Lastrum.
-Me causó gracia el otro día que un periodista de la televisión pública le preguntó al nuevo secretario general de la UTEP si las bases no se iban a levantar ante la decisión de no marchar el 20. Y él loco le dijo que precisamente él estaba transmitiendo las opinión de las bases. Que valla a marchar la gilada cuando se quede sin alimento, sin medicamentos, sin casa, sin dignidad. Nosotras ya la pasamos y ya sabemos como organizarnos ante esa coyuntura. Asamblea y olla popular-comenta el Chicho Serna mientras hace de trampolín humano pa les niñes.
-Como el peronismo acomodativo, el kirchnerismo y en particular La Campora, que parece que intuitivamente también están haciendo lo que hace su gente en los territorios: Venir cada cuatro años a decir a quien votamos y acomodarse no importa el resultado. Después pa agarrar la pala o cortar rutas no los ves nunca-observa Suipacha.
-Al menos los de la izquierda tradicional no agarran la pala pero a las marchas si van-observa el la Punky Troska.
-Pa mi hay que decirle a la conducción del peronismo lo mismo que le dijo Bilardo a sus jugadores en el entretiempo contra Brasil en el mundial del 90: “por lo menos traten de no pasársela a los de amarillo”-sugiere Vicente mirando al chico P, con líneas directa con la alta dirigencia.
-Desde nuestra república de Polonia quizás nos afecte la situación de Argentina. Pero medio que como a Uruguay. Unos pesitos menos nunca nos han quitado el humor. Ni el amor- agrega mientras le da un sorpresivo beso a la Punky Troska.
-De mientras esperamos la próxima rueda donde termine de presidente Grabois o Axel, o Riquelme o Rebord. Quien sabe. Se está armando un tuco lindo de sectores populares que lentamente invaden ámbitos políticos y mediáticos de alto nivel-se esperanza Amorcito, que en un efecto dominó trata de hablar en medio de un apasionado beso con la armenia Owinab.
-Ya te digo: es como alguna vez dijo el Cabra: que me importan las ballenas, que me importan los palestinos, yo quiero un ejército de locos que me bailen en la tumba-afirma el Gitano.
Justo cuando dice tumba aparece Anselmito, con una camisa floreada, un tatuaje hiphopero en el pecho, yerba, otro termo de mate, una frasco de cogollos, unas pepas integrales y las novedades del Comando Central de Regularización de Cuentas Claras (o chocolate espeso).
-En total por los tres días, camping incluido, tendríamos que poner diez lucas cada uno.
-¿Diez lucas por tanto amor? Me parece que acá en Argentina el amor, la alegría y el buen vivir son los únicos productos con inflación a la baja-opina el master Astor Ala.
Estas charlas o relatos transcurren en el Valle de Polonia, es decir, Ningunaparte. Son ficción. Ciencia Ficción Jipi. Cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia. Como diría Marx (Groucho): estos son nuestros principios. Si no le gustan tenemos otros.