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La Matanza: El corazón en disputa 

Por David Pike Lizárraga 

El corazón del peronismo está en disputa y como toda novela romántica, tiene más de un pretendiente. En La Matanza, el actual intendente Fernando Espinoza se medirá con la dirigente del Movimiento Evita Patricia “Colo” Cubría en las PASO de Unión por la Patria. Un amor nacional y popular erosionado por la baja participación electoral y el fantasma de la oposición.

Sin embargo, el romance en disputa no es simplemente una historia local. Su desenlace tiene efectos a escala provincial y nacional, no tanto por quien conquiste el corazón sino más bien por el tamaño del mismo. La Matanza tiene más de un millón de electores, si fuese una provincia estaría en el quinto lugar y en la última elección presidencial fue también la quinta “provincia” que más votos aportó al peronismo. 

Por ende, la elección en Matanza preocupa tanto a Axel Kicillof como a Máximo Kirchner y Sergio Massa. Algunos estudios advierten el desgaste del actual intendente con su electorado. Espinoza apunta a gobernar su cuarto mandato y anuncia que será  su último, cuenta con una alta imagen negativa, siendo según la encuestadora CB Consultora Opinión Pública el intendente con mayor descrédito de todo la provincia. 

Corazón espinado

En las últimas elecciones presidenciales, el corazón del peronismo aportó más de medio millón de votos a las fórmulas Fernández-Kirchner y Kicillof-Magario. En aquella oportunidad, el hijo político de Balestrini arrasó con el 64% de los votos consagrándose para su tercer mandato. Pero las alarmas se encendieron hace dos años en las elecciones legislativas, cuando Espinoza obtuvo apenas el 47% de los votos, cayendo el aporte matancero a la fórmula provincial y al total nacional del peronismo en casi 200 mil votos. 

La comparación entre las dos contiendas muestra que Juntos por el Cambio no creció en el distrito, por más que lo infle la prensa afín, mantuvo su caudal de votos. Lo que explica la merma del peronismo es la baja participación electoral en las elecciones de 2019, casi 100 mil electores menos asistieron a las urnas. Sumado a la gran elección del Frente de Izquierda que se acercó al 10% y a la sorpresa de los libertarios con un 5%.

Desde la intendencia se encargan de aclarar que la pérdida cuantitativa se explica por ser una elección de medio término, sin embargo las encuestas preanuncian para este año un escenario similar al de la última elección con la novedad del crecimiento de los libertarios de derecha con su candidato el Dipy. 

Por eso mismo, el 15 de julio el candidato y ministro Sergio Massa se hizo el tiempo para fortalecer su campaña en La Matanza. Inauguró junto al intendente dos pasos bajo nivel en la localidad de Laferrere, la misma obra que un febrero había inaugurado Wado de Pedro. Se espera la visita de Massa a la universidad local donde se mostraría con la contrincante Cubría. También a mediado de mes, Máximo Kirchner estuvo en el plenario del sindicato SMATA en La Matanza junto a Espinoza

La política a través de las fotos

El pasado 4 de julio, el actual intendente junto a la vicegobernadora recibieron en la municipalidad al presidente del Partido Justicialista bonaerense, Máximo Kirchner. Desde sus redes, Espinoza intentó mostrar la reunión como un gesto favorable del hijo de Cristina hacia su candidatura. 

Sin embargo, la presencia del primer candidato a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires parece ser más un intento de acercamiento con un Espinoza herido al cual, a pesar de darle la reelección de su socia Magario, lo dejaron sin un solo lugar en la lista de diputados nacionales y en la de senadores provinciales por la tercera sección. 

Sumado a esto, el actual intendente tendrá que competir en una interna con la dirigenta del Movimiento Evita. Luego de serle impedido la participación en las dos últimas oportunidades, el Frente Vecinal que lleva como candidata a la Colo Cubría intentará arrebatarle la municipalidad al barón del conurbano. 

Un acuerdo que el Evita logró en las altas esferas de la política. Acuerdo representado en la foto que sus principales candidatos a intendentes junto al líder de su movimiento Emilio Pérsico, se sacaron con Cristina Kichner en las oficinas del Instituto Patria el pasado 24 de mayo. Acuerdo que le permitirá al movimiento social presentar candidaturas a intendente en seis distritos bonaerenses, pero que tuvo el costo de dejarlo sin un solo candidato para legisladores nacionales. 

Para cargos a legisladores provinciales, el Movimiento Evita apenas logró dos candidaturas, con María Noelia Saavedra como segunda candidata a diputada provincial por la Primera Sección Electoral y Roberto Gandolfi como séptimo candidato a diputado provincial por la Quinta Sección Electoral.

La tensión de la campaña

A finales de noviembre del año pasado, una patota agredió a militantes del Movimiento Evita que realizaban pintadas en la localidad de Rafael Castillo y sus vehículos fueron baleados con al menos 8 disparos de parte de los agresores. En aquella oportunidad, un comunicado del Evita denunció que el hecho fue “un ataque a nuestra democracia, a nuestros vecinos, a nuestra militancia y a la militancia de todas las fuerzas vivas en La Matanza y no hay que dejarlo pasar por alto”. 

A la semana siguiente, en la Catedral de los Santos Justo y Pastor se llevó a cabo una Misa por la Paz y la Democracia bajo el lema “por la convivencia democrática y en repudio a la violencia política” a la cual asistieron dirigentes locales del Frente de Todos y la oposición. 

Aquel hecho preocupó por la escalada de violencia que podría generar la interna en el corazón del peronismo, pero hasta ahora no volvió a repetirse. Sin embargo, la tensión permanece y en los últimos meses fuentes locales aseguran que hubo agresiones en Casanova y Ciudad Evita.    

Cuentan referentes locales que la rotura de carteles de campaña es permanente. En algunas ocasiones, las pintadas por Cubría son rápidamente tapadas por las cuadrillas de la municipalidad y las presiones sobre la lista opositora son reiteradas. La clave de la elección aseguran estará en la fiscalización y en esa tarea los movimientos sociales que integran la lista del Frente Vecinal serán claves.

¿LLora Espinoza?

Así suena el spot publicitario de la candidata del Movimiento Evita. En una reversionada canción de Cristian Castro en la que vecinos matanceros bailan junto a Patricia Cubría mientras cantan: “Llora Espinoza, porque La Colo ya está aquí”. 

Cubría hace 15 años que es pareja de Pérsico, histórico líder del Movimiento Evita y actual secretario de Economía Social del Ministerio de Desarrollo Social. La dirigente social en la actualidad es diputada provincial del Frente de Todos, siendo este su tercer mandato.

El Movimiento Evita está teniendo su primera experiencia de gestión con Mariel Fernández como intendenta de Moreno que va camino a finalizar su primer mandato y mantiene una imagen positiva alta. Buscan replicar esta experiencia en la Matanza con Patricia Cubría, en San Martín con Leonardo Grosso y en otros cinco distritos bonaerenses (con lista larga en  Lanús, Tres de Febrero y Lobos, y con lista corta, en Marcos Paz y Navarro).  

La lista del Frente Vecinal lleva como primer candidato a concejal a Gabriel Aranda, presidente del Club Deportivo Laferrere y dirigente local de la Corriente Clasista y Combativa (CCC). Le sigue en segundo lugar Vanesa Falbi de la Universidad de La Matanza. En el séptimo lugar se encuentra Ángel Recine, presidente del Centro de Estudios Históricos de La Matanza y referente cercano al obispo de San Justo, y en el octavo lugar, Florencia Urquiza de las Organizaciones Libres Pueblo (OLP).

Por su parte, Fernando Espinoza muestra orgulloso una lista con varios jóvenes, entre ellos una estudiante de 19 años que va en el primer lugar como Consejera Escolar Suplente.  Además cuenta con el apoyo de las dos CGT locales y de la conducción de la Corriente Clasista y Combativa de la Matanza.

¿Habrá final feliz?

Para el peronismo nacional y provincial volver a acercarse a las cifras de 2019 sería como renovar el romance. Y una forma de silenciar las voces que hablan de una nueva época en La Matanza, habrá que ver quien está en lo cierto.

Espinoza se muestra seguro, habla de unidad y ningunea la interna. Dicen que Cubría estaría achicando distancia a medida que sube su nivel de conocimiento, pero corre de atrás. Como en toda novela romántica, unos y otros sueñan con un final feliz y poder conquistar el corazón al peronismo.